La porcelana siempre ha representado un componente vital en cada juego de té que el ser humano haya usado o visto. Las piezas clásicas suelen estar llenas de colores brillantes y diseños exquisitos, una especie de representación de una larga era; sin embargo, los diseños modernos han comenzado a alejarse de eso. Estos juegos evolutivos se enfocan más en las dimensiones y la funcionalidad de la pieza, perdiendo detalles. Un amante del té apreciaría un juego de té clásico, ya que eleva toda la experiencia, invitando al usuario a utilizarlo como algo más que un simple equipo.